En enero de 2013, la clínica de la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín, Colombia, recibió a un paciente con un caso extraordinario y a la vez intrigante.
El hombre de 41 años llevaba varios meses con fatiga, fiebre, tos y pérdida de peso. Hacía siete años le habían diagnosticado VIH pero no estaba recibiendo tratamiento. Leer más
El hombre de 41 años llevaba varios meses con fatiga, fiebre, tos y pérdida de peso. Hacía siete años le habían diagnosticado VIH pero no estaba recibiendo tratamiento. Leer más